El ICO lanza su primera emisión de bonos verdes y se consolida como uno de los principales emisores de bonos sostenibles del mercado europeo

02 abril 2019

La emisión de 500 millones de euros ha tenido una demanda de más de 3.400 millones

Los fondos se destinarán a financiar proyectos que contribuyan a la protección del medio ambiente y a la lucha contra el cambio climático

El 84% de la emisión ha sido adquirida por inversores internacionales

El Instituto de Crédito Oficial (ICO) ha lanzado su emisión inaugural de bonos verdes por importe de 500 millones de euros. La demanda ha superado los 3.400 millones de euros, lo que pone de manifiesto el interés de los inversores y representa seis veces el importe de la emisión, superando la media habitual de las transacciones del ICO. Este hecho ha permitido que la operación cierre con un spread de 7 puntos básicos sobre la referencia del Tesoro al mismo plazo, el más bajo conseguido por ICO en sus operaciones "benchmark".

La emisión, dirigida por BNP Paribas, Crédit Agricole CIB, ING y Banco Santander, ofrece un cupón del 0,20% y tiene un plazo de 5 años.

Los fondos se destinarán a financiar proyectos realizados por empresas españolas que contribuyan a la protección del medio ambiente y a la lucha contra el cambio climático. En concreto, según se establece en el programa marco de bonos verdes del ICO, se financiarán proyectos de energías renovables, eficiencia energética, transporte limpio, prevención y control de la contaminación, gestión sostenible de los recursos naturales y usos de la tierra y gestión sostenible del agua. El programa permitirá también la medición del impacto de los proyectos elegibles y su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, todo ello en el marco de los "Green Bond Principles2 emitidos por ICMA.

En la distribución geográfica, hay que señalar que el 84% de los bonos se ha colocado entre inversores extranjeros, destacando entre ellos los de Alemania y Austria (25%) y Benelux (17%). También ha sido notable la participación de cuentas de Asia y Oriente Medio, donde se ha colocado el 16% del papel.

El ICO realizó un roadshow previo a esta emisión, en el que se visitaron 34 inversores en 7 plazas europeas. Muchos de estos inversores internacionales han suscrito la emisión, lo que ha permitido al ICO ampliar su base inversora con nuevas entidades centradas únicamente en la compra de esta clase de bonos.

En la distribución por tipología de inversor destaca la demanda registrada por las gestoras de fondos, que han adquirido el 31% del volumen total de la emisión, seguidas por bancos centrales e instituciones oficiales (28%) y bancos (26%). El resto de la emisión se ha colocado entre aseguradoras y fondos de pensiones.

Asimismo, cabe señalar que el 65% se ha distribuido entre inversores con criterios de inversión medioambientales y sostenibles.

Esta emisión está alineada con los Green Bond Principles de ICMA (International Capital Markets Association) y cuenta con la verificación de Sustainalytics, una de las empresas líderes en análisis de responsabilidad social corporativa.

ICO, emisor de referencia europeo de bonos sostenibles

Con la emisión realizada hoy junto con las cinco emisiones de bonos sociales, por importe de más de 2.550 millones realizadas hasta el momento, el ICO es un emisor de referencia en el sector de bonos sostenibles del mercado europeo. En estas emisiones de bonos sociales el ICO se compromete a financiar los proyectos de empresas localizadas en CCAA con un PIB per cápita inferior a la media española, con el objetivo de promover el crecimiento económico inclusivo y la necesaria mejora de la distribución de la renta.

El banco público afianza con esta nueva emisión su posición dentro de lo que se denomina en los mercados internacionales de capitales ¿sustainability bonds¿ o bonos sostenibles. Los fondos de este tipo de emisiones se utilizan para financiar operaciones que generen un impacto social o medioambiental positivo.  Con esta emisión el ICO refuerza su posición en un mercado más especializado y centrado en la potenciación de una economía más enfocada al desarrollo sostenible.

Además de ocupar un papel destacado en los mercados financieros sostenibles, el ICO trabaja para impulsar la sostenibilidad como eje vertebrador de su actividad y como parte esencial de las políticas de Responsabilidad Social Empresarial.