Entrevistamos a Cristina Castellà Caspir y Alejandro Saint-Jean
Fundadores de la empresa Alma Visión Euroamérica
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El Instituto de Crédito Oficial como banco nacional de promoción tiene una doble responsabilidad en el ámbito de finanzas sostenibles: por un lado, estar a la vanguardia con la puesta en marcha y lanzamiento de nuevas iniciativas y por otro, potenciar la sostenibilidad entre las pymes. Este compromiso queda reflejado en la estrategia del ICO para los próximos años, que presta especial atención a las actuaciones orientadas a promover la transición ecológica y la sostenibilidad medioambiental, social y de gobernanza del tejido empresarial.
De acuerdo a esta hoja de ruta, el ICO ha introducido importantes novedades en sus Líneas de Mediación, con la colaboración de las entidades financieras, con el objetivo ayudar a las empresas de menor tamaño a medir el impacto que generan los proyectos que emprenden, desde un punto de vista social y medioambiental.
Para ello resulta fundamental el esfuerzo conjunto que están llevando a cabo los autónomos y pymes, las entidades financieras que comercializan estos productos, y el ICO, estandarizando la información y requisitos que las pymes han de tener en cuenta a la hora de analizar las variables y cifras que les ayudarán a medir el impacto positivo que están generando sus proyectos en los ámbitos ligados con la sostenibilidad.
Para la puesta en marcha de esta iniciativa, el ICO ha realizado un intenso trabajo de estudio y estandarización de métricas con el objetivo de que las entidades financieras y los autónomos y empresas puedan recoger de forma sencilla y ágil mediante un cuestionario, la información necesaria para poder llevar a cabo este análisis.
De esta forma, el ICO, sigue innovando y mejorando sus Líneas de Mediación, producto de referencia en la financiación empresarial, facilitando que autónomos y pequeñas empresas incorporen la sostenibilidad en su cultura empresarial como uno de los aspectos a tener en cuenta a la hora de analizar un proyecto y buscar financiación para ello.
La empresa que protagoniza hoy nuestra entrevista, Alma Visión Euroamérica, es una de las pymes que está llevando a cabo, con la operación suscrita con BBVA, un proyecto que cumple con estos parámetros de sostenibilidad.
Cristina y Alejandro son dos emprendedores cuyo proyecto aúna los campos de la salud y la digitalización con el objetivo de desarrollar una empresa con altas dosis de innovación y sostenibilidad. Su profesión de oftalmólogos les ha llevado a desarrollarse laboralmente en diferentes países, como Francia o Estados Unidos. Instalados actualmente en España, su idea empresarial toma forma y nombre propio para poner en marcha Alma Visión Euroamérica: una clínica oftalmológica con sede en Reus (Tarragona) y una gran gestión digital adaptada a las necesidades de los pacientes.
¿Cómo nace el proyecto emprendedor Alma Visión Euroamérica?
Alma Visión Euroamérica es el nombre de la sociedad profesional, y nuestra clínica se llama Saint-Jean & Castellà, Institut Oftalmològic.
Esta nace después de recorrer varios países y formas de ver la especialidad de Oftalmología. Francia, Estados Unidos, Chile ,Inglaterra y Suiza nos hicieron aumentar nuestras inquietudes y las ganas de aportar en España lo aprendido en esas latitudes.
¿Cuáles son los puntos clave de vuestro negocio y en que os diferenciáis de una clínica oftalmológica convencional?
Los puntos claves de nuestro negocio son la transparencia,cercanía y profesionalidad. Aquello que más nos identifica son las ganas de aprender cada día y de aportar a nuestra comunidad las últimas técnicas en oftalmología.
¿Qué papel juega la sostenibilidad en vuestro negocio y cómo se relaciona con la innovación y digitalización que caracteriza a vuestra clínica?
Primero que todo trabajamos de la mano de empresas y personas locales. Disponemos de una digitalización avanzada en los procesos diagnósticos y terapéuticos para disminuir así el uso del papel y tener un contacto más directo con los pacientes. Los pacientes dispondrán de una aplicación móvil para poder acceder a todas las pruebas realizadas, pedir citas, informes, recordar tratamientos y resolver dudas con nosotros, aunque la cercanía y el contacto fácil por los canales tradicionales seguirá siendo una prioridad.
¿A qué habéis destinado la financiación ICO concedida a través de las Líneas de Mediación?
Hemos destinado los fondos a crear un espacio de trabajo agradable y cercano y sobre todo para disponer de la tecnología más puntera en oftalmología.
¿A qué retos o dificultades os habéis tenido que enfrentar a la hora de poner en marcha un negocio propio?
Los retos son incesantes hasta el día de hoy. Desde el momento de la idea de crear un centro no hemos parado de lidiar con desafíos diversos. Afortunadamente, los hemos ido solucionando en conjunto con la red de profesionales locales con los que estamos trabajando. Para nosotros trabajar en equipo ha sido la clave.
¿La salud digital ha llegado para quedarse? ¿En qué punto se encuentra el desarrollo de esta disciplina?
Todavía queda camino por recorrer, sin embargo se ha avanzado rápidamente en este campo en el último tiempo, siendo la crisis sanitaria uno de los motores de esta transformación. Nos encantaría sentirnos cercanos al paciente a través de los medios digitales, ayudarle a través de alarmas a la adherencia al tratamiento, etc.
¿Cuáles son vuestros planes de futuro a corto/medio plazo?
Nuestra idea es otorgar un servicio oftalmológico de calidad en nuestra región y solucionar cualquier necesidad que se le presente a nuestros pacientes, gracias a la tecnología más avanzada que antes solo se encontraba en las grandes ciudades.
¿Qué consejo le daríais a alguien que tenga una idea emprendedora y no se atreva a dar el paso definitivo?
Existen muchos miedos en el camino que pueden aparecer, sin embargo si uno tiene claro que puede aportar algo positivo a la sociedad y su entorno cercano vale la pena enfrentarse a esos miedos e ir a por ello.
